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Resumen
¿A quién beneficia esta idea?
¿Qué problema resuelve esta idea?
Idea en detalle
Vivimos en el siglo XXI, en una época marcada por el reconocimiento de los derechos humanos, la autonomía individual y la equidad de género. En este contexto, la legalización del aborto sin restricción de causa es una medida coherente con los principios democráticos y con los avances de países desarrollados, especialmente en Europa, donde esta práctica ya está legalizada en la mayoría de las naciones, tales como Francia, España, Alemania, Países Bajos y Suecia.
Esta propuesta se basa en el derecho de las personas gestantes a decidir libremente sobre su cuerpo y su vida reproductiva, sin necesidad de justificar su decisión ante el Estado o ante terceros. Es una expresión concreta de la libertad individual y de la no injerencia estatal en decisiones íntimas, tal como lo reconoce la Corte Interamericana de Derechos Humanos en relación con el derecho a la vida privada (Opinión Consultiva OC-4/84).
No obstante, también creemos que el Estado debe actuar con responsabilidad y sostenibilidad. Por ello, proponemos que el aborto legal sin causal no sea gratuito en todos los casos. Se mantiene la gratuidad para las tres causales actualmente permitidas por ley (riesgo de vida de la madre, inviabilidad fetal y violación), pero en aquellos casos que no se encuadren dentro de estas causales, la persona solicitante debería asumir un copago, proporcional a su situación socioeconómica.
Para asegurar la equidad y no excluir a personas en situación de vulnerabilidad, el sistema público podría implementar un sistema de apoyo financiero progresivo, que incluya subsidios totales o parciales según tramos de ingreso, cargas familiares u otras condiciones. Esto se puede estructurar de manera similar a cómo funciona hoy Fonasa o los copagos en salud pública.
📊 Evidencia Internacional
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la legalización del aborto reduce la mortalidad materna. En países donde el aborto es legal y seguro, la tasa de complicaciones y muertes relacionadas con abortos inseguros es casi nula.
Estudios del Guttmacher Institute indican que en países con aborto legal, las tasas de aborto tienden a ser más bajas, debido a una mejor educación sexual y mayor acceso a métodos anticonceptivos.
En Francia, el aborto es legal sin restricción de causa hasta las 14 semanas y está cubierto por la seguridad social. Sin embargo, en algunos países como Alemania o Suiza, el aborto fuera de causales específicas es legal, pero requiere un procedimiento previo (como consejería obligatoria) y, en ciertos casos, debe ser financiado por la persona solicitante si no entra en causales.