Propuesta 3.2: Profundizar un circuito de valor en las trayectorias formativas desde la
educación media TP hacia el mercado laboral minero y escalar este modelo a rubros estratégicos
para el país.
La conexión entre las necesidades de la industria y la formación académica es clave para garantizar
que los jóvenes estén preparados para enfrentar los desafíos del futuro potenciando no solo sus
habilidades técnicas, sino su crecimiento profesional, permitiéndoles alcanzar su máximo
potencial en un entorno laboral en constante evolución. Hacia el 2032 la industria necesitará más
de 34 mil nuevos talentos, aumentando en más de un tercio respecto a los 25 mil identificados hace
dos años en el reporte anterior. Adicionalmente, los tipos de perfiles que más se requerirán son los
relacionados con la educación técnica para puestos como mantenedores mecánicos y operadores
de equipos móviles.
Acorde al estudio “Panorama Educacional TP Minero: Análisis de la Oferta Formativa TécnicoProfesional y Superior vinculada a la Minería” (2024), elaborado por la Alianza CCM-Eleva,
presenta varias luces sobre el panorama TP. En primer lugar, el aumento de la matrícula de mujeres
en carreras vinculadas a la minería, tanto en la Educación Media Técnico Profesional (EMTP)
como en la Educación Superior. En el análisis de trayectorias educativas, el estudio revela una alta
afinidad entre la formación media y superior: el 73% de quienes egresan de especialidades mineras
en la EMTP continúan sus estudios en la Educación Superior en áreas afines. Sin embargo, esta
continuidad formativa presenta una fuerte brecha de género, con un 80% de los hombres siguiendo
trayectorias mineras frente a solo un 39% de las mujeres. Bajo este prisma, se vuelve prioritario
ampliar la oferta formativa y aumentar la matrícula en la Macrozona Norte, y por otra, resulta
fundamental consolidar la recuperación de la titulación oportuna, asegurando que más estudiantes
completen sus trayectorias formativas, especialmente en contextos y grupos donde aún persisten
brechas significativas, en especial si lo vemos comparativamente entre hombres y mujeres.
En relación a lo planteado, se propone:
1. Diseño de Trayectorias Formativas Sectoriales
- Mapeo de perfiles laborales críticos, junto a Alianza CCM-Eleva, MINEDUC, Instituciones de
Educación Superior y empresas de distintos rubros estratégicos del país, para elevar un análisis de
la brecha entre lo que se pide en las industrias y lo que se está enseñando. Esto debe tener una
visión regional y nacional. - Ajuste curricular EMTP para alinearse con estándares de las industrias estratégicas (competencias
técnicas, blandas y digitales). - Certificación intermedia en 3° y 4° medio con reconocimiento sectorial (SENCE, ChileValora,
Consejo Minero).
2. Alianzas Público-Privadas para Formación Dual
- Convenios con empresas mineras para prácticas profesionales, mentoría y co-diseño curricular.
- Modelo de formación dual adaptado, con alternancia entre liceo y empresas.
- Incentivos tributarios para empresas que participen en formación dual y contratación de egresados
EMTP.
3. Escalamiento a Rubros Estratégicos
- Identificación de sectores prioritarios: energía renovable, agroindustria exportadora, manufactura
avanzada. - Replicación del modelo con ajustes territoriales y productivos.
- Creación de “Centros de Trayectorias EMTP” por macrozona, con infraestructura compartida y
gobernanza público-privada.
4. Paraguas normativos a desarrollar
- Resolución Mineduc para ajuste curricular sectorial EMTP
- Decreto conjunto Mineduc–Economía para creación del programa “Trayectorias de Valor EMTP”
- Modificación reglamentaria en SENCE y CORFO para priorizar sectores estratégicos en formación
y mentoría.